La piel también requiere una adecuada hidratación así como tu cuerpo.
Nuestro cuerpo contiene al rededor del 60% de agua, la cual tiene gran importancia en el funcionamiento de nuestro organismo. A diario perdemos gran cantidad de esta agua, la cual se debe reponer frecuentemente. Rehidratar tu cuerpo es tan importante como rehidratar tu piel, por lo que aplicar la hidratación perdida directamente a tu piel es crucial para su salud y apariencia.
Beneficios de hidratar la piel
Es el órgano más grande por lo que requiere una hidratación adecuada para rendir al máximo. Mantener la piel bien hidratada puede ayudar a:
- Retrasar el proceso de envejecimiento: No hablamos de todos los aspectos del proceso de envejecimiento, pero sí de los signos visibles del envejecimiento prematuro. Mantenerse bien hidratado puede ayudar a mantener la elasticidad de su piel y combatir la aparición de arrugas y otros signos.
- Mejorar la apariencia de tu piel: La falta de hidratación puede hacer que tu piel se vea seca, con aspecto escamoso y tensa. Mantener la piel hidratada no solo ayuda a que parezca más gruesa, nutrida y flexible, sino que también contribuye a abordar la opacidad de la superficie combatiendo la acumulación de células muertas de la piel.
- Liberar tu piel de toxinas: Cuando se hidrata adecuadamente, la piel adquiere un brillo más radiante. La piel no puede deshacerse de las toxinas sin una hidratación adecuada, lo que puede provocar irritación e inflamación.
- Luchar contra el grasa y el acné: Aunque pueda parecer contradictorio, la piel deshidratada envía señales a las glándulas para que produzcan más grasa, como una especie de mecanismo de defensa. Al mantener la piel bien hidratada, se vuelve menos grasa y el acné tiende a moderarse o agravarse menos.